Sazonador ajo y perejil

Perfecto complemento para multitud de recetas, el sazonador ajo y perejil nos permite dar ese toque tan nuestro de una forma rápida y cómoda. Sin tener que pelar y picar ajos y perejil.

Ingredientes

Ajo molido y perejil. Como siempre, nada más, por supuesto.

Sugerencias e ideas

Rebozados y empanados: mezclado con la harina, el pan u otros ingredientes que empleemos en los rebozados y empanados enriqueceremos el resultado final.

Gratinados: sobre unas verduras al horno, una coliflor con bechamel, unas vieiras al horno, etc.

En elaboraciones a la plancha: espolvoréalo en pescados o verduras a la plancha casi al final de la cocción.

En salsas para mojar: añade la mezcla de ajo y perejil con yogur griego, mayonesa o crema agria para hacer una salsa deliciosa para mojar vegetales, patatas fritas o pan de pita.

Como ingrediente de aderezos: mézclala con aceite de oliva, vinagre y mostaza y disfruta de un aderezo delicioso para ensaladas.

Para condimentar salsas: Agrega la mezcla de ajo y perejil a salsas como la salsa de tomate, la salsa de queso o la salsa de crema para darles un toque extra de sabor y aroma.

En sopas y guisos: añade la mezcla de ajo y perejil a sopas y guisos como una forma fácil de agregar sabor y aroma.

Sal con ajo y perejil: llena un tarro con sal gruesa hasta algo más de la mitad y añade un par de cucharadas soperas de ajo y perejil. Mezcla bien y deja reposar unos días. Tendrás una estupenda sal aromatizada para emplear en multitud de platos. 

Errores al usar el ajo y perejil

Echar la mezcla directamente a la sartén: el ajo y perejil están deshidratados, por ello es preferible añadirlos al final del proceso de cocción, para evitar que se quemen y se vuelvan amargos.

No hidratar la mezcla: Si la mezcla de ajo y perejil secos no se hidrata adecuadamente antes de agregarla a una receta, puede ser difícil de distribuir uniformemente y no se mezclará bien con otros ingredientes.

No almacenar adecuadamente: Es importante almacenar la mezcla de ajo y perejil secos en un lugar fresco y seco, lejos de la luz directa del sol, para evitar que se degrade y pierda sabor.